¿Cuenta de ahorro o depósito a plazo fijo? La eterna pregunta que os hacéis muchos. La diferencia entre una y otro es que con la primera siempre tendrás tu saldo disponible, mientras que con el segundo tendrás que comprometerte a no tocar tu dinero durante el plazo firmado con la entidad.
Ahora bien, si buscas es una rentabilidad alta, los depósitos a plazo fijo suelen ser la mejor alternativa, ya que los bancos que ofrecen estos productos apenas ponen límite a la cantidad máxima que te remuneran y, si lo hacen, el tope que establecen suelen ser muy elevado. Por el contrario, con las cuentas remuneradas –sobre todo, con las que ofrecen el interés más alto- es habitual que tengas un límite y que este no supere los 5.000-6.000 euros. En cualquier caso, si decides contratar un depósito a plazo fijo, te recomendamos que tengas en cuenta dos cosas:
- El plazo de tiempo que tendrás que comprometerte con tu banco a no tocar tus ahorros, ya que de tocarlos, te pueden cobrar una importante penalización económica. En algunos casos, incluso, ni siquiera te permitirán una cancelación anticipada.
- Con los depósitos a plazo fijo – al igual que con cualquier cuenta bancaria- siempre tendrás la protección de Fondo de Garantía de Depósitos. Este mecanismo te permitirá que, en caso de quiebra de un banco, puedas recuperar tu dinero, pero con un límite de 100.000 euros por entidad y por titular. Por tanto, te recomendamos que, en caso de sobrepasar este importe, no mantengas todos tus ahorros en la misma entidad, ni a nombre de la misma persona.
Para encontrar el mejor depósito bancario, es decir, el que mejor se ajuste a tu perfil, en nuestro ranking mensual te mostramos las ofertas más atractivas en función del plazo que elijas (uno, tres, seis, nueve, 12, 18, 24 y más de 24 meses) y de otros criterios- como es la nacionalidad de la entidad o si se puede contratar a través de Internet.